LA INVERSIÓN EN I+D+i MANTIENE A BECSA A LA CABEZA DE LA INNOVACIÓN

La inversión en I+D+i es una carrera a toda velocidad por lograr ser la locomotora que dirija el sector de la construcción. Es tan cruda la competencia que incluso las distintas universidades de España tienen departamentos específicos de I+D donde desarrolla nuevas técnicas de vanguardia para después vender las patentes a otras empresas. Becsa tiene su propio laboratorio de I+D+i lo que favorece que pueda competir con superioridad frente a otras compañías constructoras que tienen que pujar por patentes de estas universidades o de empresas como la misma Becsa.

A la hora de conseguir una adjudicación pública o de realizar un proyecto para ganar un concurso privado, no solo entran en juego la experiencia y la capacidad de una empresa para gestionar el proyecto planteado, sino que la previsión a futuros sobre las investigaciones presentes aportan un gran valor añadido. Cuando Becsaha construido puertos marítimos o simplemente carreteras o plantas de reciclaje y tratamiento de residuos, por normal general ha ganado la adjudicación por su competitividad, que es un reflejo de su inversión en I+D+i.

RENTABILIDAD SOBRE LAS INVESTIGACIONES DE BECSA

La Consejería de Fomento y Vivienda ha contado con Becsa para desarrollar autovías aplicando técnicas innovadoras. No solo buscando la rapidez de organización y de ejecución de la obra o su posterior mantenimiento, sino que también exigen la formulación de materiales reciclados para reducir el impacto sobre el medio ambiente.

Uno de los casos más conocidos fue la utilización de un compuesto de mezclas bituminosas templadas, que al producirse a temperaturas inferiores a los 100 grados centígrados favorecen la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Lo que impacta doblemente tanto en las personas que rodean la cadena de fabricación como en los usuarios finales de la autovía. Y es que las mezclas calientes para fabricar las vías de asfalto generan una cantidad muy elevada de gases y compuestos volátiles, sin mencionar que hay que gastar una enorme cantidad de energía sólo para calentarlo.

Otro de los apartados sobre los que Becsa puede presumir es el ahorro energético y la eficiencia del consumo de sus proyectos. La factura eléctrica de un cliente tan grande como el Estado supone un gasto muy elevado, por lo que el Gobierno siempre busca empresas que le garanticen una mejor gestión de la iluminación, y que esto se traduzca en una reducción del gasto energético sin que influya en la calidad del servicio o disminuya la potencia lumínica de las vías públicas.

NUEVAS TECNOLOGÍAS Y AMORTIZACIÓN A LARGO PLAZO

El uso de las nuevas tecnologías responde a un cambio cultural muy acusado que se lleva prolongando durante los últimos 15 años. No solo son habituales los planes oficiales de vivienda de los diferentes gobiernos, sino que la tecnología que se desarrolla cada año tiene un espectro de amortización muy elevado. A pesar de que hay pequeños cambios cada cierto tiempo, la nueva cultura que predomina exige nuevos materiales que permitan una construcción sencilla, rápida y alejada del método tradicional.

Becsa ha adaptado sus plantas de producción y continua invirtiendo en I+D+i, por lo que  los tiempos de construcción se reducen, aumenta el modelo productivo y todo se traduce en mayor volumen de negocio y un aumento considerable de los ingresos como retorno de la inversión.

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